jueves, 7 de febrero de 2008

Ganesh

Ganesh. Mis compañeras de viaje me empiezan a llamar así, María lo inició, por la suerte que estamos teniendo cuando hemos ido a Nagarkot para ver al completo toda la cordillera del Himalaya. Perfectos los días, claros y soleados con las montañas al alcance de la mano. El sitio, q, antiguo y pequeñito dedicado a Shiva y su compañera Parvati era la corona de nuestro hotel. Yo feliz. Las personas que vamos conociendo me llaman “ el hombre feliz”. Aquí se valora mucho la sonrisa y a las personas que se ríen. Ante los problemas los nepalíes se ríen a carcajadas para ahuyentar el mal.
Con ellos he jugado a un juego nepalí que consiste en hacer malabares con un palo largo forrado con cuero y flecos del mismo material que se maneja con otros dos mas cortos. No quiero parecer presumido pero se me dio bastante bien.También jugué a dar patadas a una madeja de gomillas negras y pasarlas al compañero. Esto se me dio fatal pero nos reímos mucho. Mis compañeras mientras estaban pintando. Yo solo he pintado una mancha roja con dorados y no creo que pueda hacer nada más. No puedo concentrarme en un papel blanco cuando todo a mi alrededor llama mi atención poderosamente. Puedo estar horas mirando solamente, pero se que tengo que hacer algo para corresponder al regalo de Shivendra. Realmente estoy teniendo mucha suerte. ¿Ganesh el querido por las mujeres? ¿me crecerá la trompa?.
Nos levantamos a las cinco de la mañana para ver la salida del Sol, Surya Udaeko, en lo más alto de la zona. Cuando llegamos al lugar hay otras personas esperando ver lo mismo. Los japoneses y norteamericanos que miran las montañas. Un grupo de personas de India mira la impresionante salida del Sol. Surya Namaste.

1 comentario:

Fátima García dijo...

¿Ganesh el querido por las mujeres? Empiezo a escribir nombres de mujeres?? jejeje.
Más besos.
Y ya pintarás, ahora disfruta.